Ella nace en 1515 en Alba de Tormes, España, fue escritora, religiosa muy creyente. También la llamaban Santa Teresa de Ávila. Su nombre completo era Teresa Sánchez de Cepeda Dávila y Ahumada, luego que inicio la reforma, su nombre cambio a Teresa de Jesús. Sus padres fueron Alonso Sánchez de Cepeda, y Beatriz Dávila y Ahumada. La madre de Teresa muere con tan solo 12 años. Teresa tuvo 10 hermanos. Entre sus obras tenemos La Vida, Las Relaciones Espirituales, El Libro de las Fundaciones y sus cartas. Era fanática de los libros de caballerías y de vidas de santos.
En 1531, su padre la internó como pupila en el convento de monjas agustinas de Santa María de Gracia, pero debido a una enfermedad vuelve a su casa al año siguiente. En 1535 huye de su casa determinada a tomar el hábito carmelita en contra la voluntad de su padre. Viste el hábito y en 2 años hace su profesión.
Comienza una época de angustia y enfermedad para ella, que duraría hasta 1542, en donde aprende a confiar ilimitadamente en Dios y empieza a practicar el método de oración llamado recogimiento expuesto por Francisco de Osuna. Instruye a un grupo de religiosas de la Encarnación en la vida de oración y planea la reforma de la orden carmelitana para devolverle el antiguo rigor, mitigado en 1432 por Eugenio IV.
Es favorecida con visiones imaginarias e intelectuales, que habrían de suceder a lo largo de su vida y que determinaron sus crisis para averiguar si aquello era oba de Dios o el demonio. Su ideal de reforma de la orden se concretó en 1562 con la fundación del convento de San José. Se inicia entonces una nueva etapa en su vida, en la que la dedicación a la contemplación y la oración es compartida con una actividad extraordinaria para conseguir el triunfo de la reforma carmelitana.
Fundó en Medina del Campo, Malagón, Valladolid, Toledo, Pastrana, Salamanca, Alba de Tormes, Segovia, Beas, Sevilla, Caravaca, Villanueva de la Jara, Palencia, Soria y Burgos, desde 1567 hasta su muerte. En 1568 se erigió en Duruelo el primer convento reformado masculino. Redacta las constituciones que son aprobadas en 1565 por Pío IV, y tratan vida de oración en la celda, ayuno y abstinencia de carne, renuncia de rentas y propiedades, comunales o particulares, y práctica del silencio.
Compuso Camino de Perfección y las Moradas o Castillo Interior. La reacción de los miembros de la antigua observancia carmelita llegó a su punto culminante en 1575, año en que denunciaron a los descalzos a la Inquisición. Un breve de Roma, en 1580, ordenó la separación de las dos órdenes.
Ella muere en brazos de Ana de San Bartolomé la noche del 4 de octubre de 1582 (día en que el calendario juliano fue sustituido por el calendario gregoriano en España, por lo que ese día pasó a ser, viernes, 15 de octubre). Su cuerpo fue enterrado en el convento de la Anunciación de esta localidad, con grandes precauciones para evitar un robo.
En 1604 se inició el proceso de canonización de Teresa. En 1614 fue declarada beata, y en 1622 fue canonizada por Gregorio XV. En 1970 fue proclamada doctora de la Iglesia, siendo la primera mujer que recibía esta distinción. Además de las obras ya citadas, dejó escritas las siguientes: Meditaciones sobre los cantares, Exclamaciones, Visita de descalzas, Avisos, Ordenanzas de una cofradía, Apuntaciones, Desafío espiritual, Vejamen y unas treinta poesías.
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